Este fin de semana hemos estado de reparto de invitaciones. Ha sido muy intenso pero muy reconfortante. Hemos visto a mucha familia que hacía tiempo que no veíamos y pasamos unos ratos muy buenos con todos.
Y así, estando por Ribafrecha, estuvimos comentando las estadísticas que publicamos en la entrada número 37 de este blog. Entre risas y cachondeos nos han salido otra serie de estadísticas adicionales que añadir a esos primeros datos. Por lo tanto, no le vamos a dar más vueltas y ahí vamos con ellas. Desde que hicimos público que nos íbamos a casar:
– Cuatro personas han roto con sus parejas.
– Dos personas han encontrado pareja (con lo que compensamos un poco lo anterior).
– Dos invitados empezaron a salir entre ellos y ya no salen (con lo que volvemos a la posición de partida).
– Entre los invitados han surgido ocho embarazos (lo que hace muy difícil la asistencia a la boda pero… ¡¡¡qué alegría!!!)
Algunas cosas son buenas y algunas cosas son malas, pero por lo menos no hay nada irremediable. Cruzaremos los dedos.